domingo, 27 de septiembre de 2015

Eclipse vital

Me despierta un ruido sordo.
Son mis tripas congelándose,
es mi pelo retorcido
al que le llega el invierno.

Miro al cielo buscando la luz
pero la oscuridad me devora
la luna se ha ocultado en este instante.

Cubro mi cuerpo herido con otra manta
será la implacable
será mi salvadora.
Pero tiene agujeros
se le cuelan mis miedos.

Tal vez, si cierro los ojos
solo habrá otra oportunidad.

Mis dientes se me han bajado a las costillas.

Solo deseo no dejar de sentirme en casa.

Me despierta un ruido sordo:
es mi vida la que se ha eclipsado
al ver el corazón tambalearse

sábado, 26 de septiembre de 2015

Noche de trueno y cenizas

Te reflejas en mi memoria
levantando palabras escondidas tras mis huesos.
Estás lejos como la verdad
pero esta noche extraña
te siento más cerca que nunca.

Mi pecho está lleno de hormigas
que corren donde quieren
pisan fuerte
y no me dejan respirar.

Incluso cuando me miro mis manos
me siento otra.

Pero tú,
mi salvadora,
te reflejas en mi memoria
y el cariño me invade por completo.

Tal vez
te vuelen aves muertas por la tripa
y la lengua te sepa a alquitrán.

Piénsame,
dibújame entre tus labios,
entre tus brazos,
entre tus piernas,

y siénteme dentro,
muy dentro de ti.

Compañera:

jamás,
mientras te escriba,
volverás a estar sola
aunque estés sola.
Moncayo sigue oliendo a ti.