"La muerte está lejana. No me mira.
¡Tanta vida Señor!
¿Para qué tanta vida?"
Alejandra Pizarnik
Algo paraliza el transcurso de las cosas
y llega el penoso momento de mirar en tu espejo.
Lo que has hecho y no debes golpea fuerte
hasta romperlo, y pronto el deber carece de sentido.
La coherencia de ti misma queda lejos,
ya es imposible trazar una línea ni encajar los hilos.
Los días van saltando en el recuerdo
y la imaginación rellena los huecos de mentiras
pero eso no llena
tu espejo no va a ser útil
mejor tomar un cristal
y teñirlo de sangre
pero entonces sí existe el siempre.
El reto está
en seguir viviendo
aunque no quede nada por lo que hacerlo.
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