domingo, 12 de febrero de 2012

Añoranza en tonos grises

Me bebes con miradas
te anhelo con palabras.

Vas abriéndote paso hacia mí,
hacia el centro de mi nada
ahora para siempre llena.

Vas desquitando el dolor de mi rostro
nunca he sido feliz dos días seguidos
pero has llegado justo a tiempo.

No paro de pensar de sentir de mirar
de flotar sin aire sin bruma sin nada,

contigo.

La noche me va hablando
y yo escribo la noche
para que pase
¡con lo que amaba la noche!
Ahora es fría si no vienes
como esta cama.

Sustituir mis brazos por los tuyos
arrancarme estos ojos si así te quedas cerca
donde yo contemple tu sonrisa muda
tu rostro como de cuento
o de ilusión o de sueño.

Estás cubierta de un halo brillante
y yo lo amo.

No quiero nada,
no me devuelvas el corazón
ya solo es tuyo
guárdalo o rómpelo

todo lo que quiero es que me beses con las manos.

La noche me habla de ti
todo me suena a tu nombre.

Deslizarse por las paredes del amor
y ser una misma entidad
una única figura que deshace la cama
una mano enlazada
tu boca, tus pecas,
la de la espalda
no quiero que quede nada en el olvido silencioso
me has devuelto lo que no he tenido.

Solo ven,
yo te doy mi todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario