Te echo de menos más
de lo que puedo decir.
Porque el aliento
se vuelve lento
como el tiempo
que no pasa
y como el viento
que no arrastra.
Te echo de menos.
Las nubes no llueven
ni el árbol florece.
A la rosa el tallo,
al abril su mayo,
al perfil su trazo,
al candíl su halo,
y al jazmín su rastro
le faltan siempre
lo que a mi de ti
cuando te extraño.
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